Qué es la corriente galvánica
Los equipos de corriente galvánica utilizan dos diodos en forma de rodillo o bola que generan un flujo sostenido de electrones de un polo positivo a otro negativo. Así, mediante la iontoforensis (es decir, la transferencia de iones), es posible la penetración de los principios activos en la piel para los tratamientos faciales de limpieza profunda.
A continuación, se aplica la loción cutánea adecuada según el tipo de tratamiento. Esta loción iónica tiene una carga eléctrica que le permite desplazarse hacia el polo de signo contrario, a través de la piel.
En primer lugar, se extiende una loción con pH alcalino (pH superior a 7) en la zona a tratar y, a continuación, se aplica la corriente con la polaridad correcta. El flujo continuo de energía facilitará la penetración de la loción en la piel, ablandando y licuando el sebo acumulado en los folículos de las pieles grasas. Si se trata de una piel seca, el tratamiento estimula la circulación sanguínea.
Aplicar una loción con pH ácido (con pH inferior a 7) en la zona a tratar y, a continuación, activar la corriente con la polaridad adecuada para el tratamiento de ionización. La potencia continua potenciará la penetración de los principios activos de la loción en la piel. Este modo cierra los poros después de un tratamiento facial. También disminuye el enrojecimiento de la piel después de un tratamiento de acné, granos y manchas.
Ventajas de la corriente galvánica
Los beneficios de la corriente galvánica son numerosos y el tratamiento es adecuado para todo tipo de pieles. La edad y la constante exposición a los elementos pueden hacer mella en la piel, especialmente en la del rostro. Los tratamientos faciales galvánicos revitalizan la piel aumentando la circulación sanguínea, mejorando el tono y la firmeza de los músculos, promoviendo un rápido metabolismo y renovación celular y limpiando los poros obstruidos.
Se trata de un “lifting no quirúrgico” para potenciar la piel sin tener que someterse a cirugía o inyecciones. El aparato o mensajero tiene una base de cromo que conduce la corriente galvánica directamente sobre la piel. El tratamiento ayuda a mejorar los niveles de hidratación y la circulación sanguínea del rostro. El resultado es un brillo radiante y juvenil, con una piel más suave y firme.
El primer tipo de tratamiento es la iontoforesis. Este procedimiento utiliza un gel con carga positiva que se aplica a la piel. Se le entrega un electrodo negativo para que lo sostenga o se apoya en su hombro. A continuación, se hace pasar una corriente cargada positivamente a través de la piel, empujando el producto hacia las capas epidérmicas. Esto aumentará drásticamente la absorción de todos los productos para la piel que se utilicen después del tratamiento.
Tratamiento con corriente galvánica
Las corrientes galvánicas fueron descubiertas por un médico y físico italiano del siglo XVIII llamado Luigi Galvani. En sus primeros trabajos, descubrió que el cuerpo conduce corrientes eléctricas. Desde entonces, los spas y los profesionales de los salones de belleza han utilizado las suaves corrientes galvánicas en tratamientos personalizados para refrescar y energizar la piel durante varias décadas. La suave acción de masaje de un tratamiento galvánico ayuda a concentrar la energía celular y a aumentar la circulación para mejorar la claridad y la complexión de la piel.
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Corriente galvánica positiva
Todos los instrumentos galvánicos utilizan cargas eléctricas para transportar mejor los ingredientes clave a la piel, proporcionando mayores beneficios. El spa facial utiliza la ley de las cargas eléctricas: “las cargas similares se repelen y las opuestas se atraen”. Este poder se aprovecha para extraer las toxinas y hacer llegar los ingredientes curativos y antienvejecimiento a lo más profundo de la piel.
Disfrute de los beneficios de una visita a un balneario de calidad, haciendo que este cuidado forme parte de su rutina habitual de cuidado de la piel contra el envejecimiento, todo ello en la comodidad de su propio hogar. Con dos conductores intercambiables, el Spa Facial cuenta con ajustes para una sesión de 10 minutos en todo el rostro y tres sesiones de cinco minutos en zonas específicas para adaptarse a sus necesidades, preferencias y estilo de vida. El gel conductor incluido conduce la corriente y ayuda a que el dispositivo Facial Spa se deslice suavemente sobre la piel.
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